-Episodios: T1-25 / T2-26
-Sinopsis personal-
El equipo de baloncesto, Teiko, era conocido y
temido por todos; y no por ganar durante años todos los campeonatos, sino por
los 5 temidos miembros del equipo, a los que llamaban “La Generación de los
Milagros”, gracias a las diferentes habilidades que poseía cada uno.
Después de graduarse, cada uno de los miembros
ingresó en una preparatoria diferente, por lo que se separaron y nunca más
volvieron a jugar juntos.
Al parecer, hubo un sexto miembro en la “Generación
de los Milagros”, llamado el jugador fantasma, del que muy poca gente ha oído
hablar, por lo que no hay mucha información al respecto.
Ahora, este sexto ex jugador fantasma llamado
Kuroko, ha ingresado en la preparatoria Seirin, la cual está buscando nuevos
miembros para su club de baloncesto. Su ingreso en el club coincide con el de
Kagami, un nuevo estudiante. Kuroko tiene como objetivo el vencer a los
miembros de la “Generación de los Milagros” y conseguir que Kagami se convierta
en el mejor jugador de Japón.
-Opinión personal (sin spoilers)-
Kuroko, aunque es el que da nombre a la serie, comparte
protagonismo con su compañero de equipo, Kagami, que ha estado viviendo en
Estados Unidos y posee un talento natural para el baloncesto. Juntos, forman un
tándem perfecto, que se complementa a las mil maravillas y aunque no lleven
mucho tiempo jugando juntos, eso no será un impedimento, ya que su
sincronización es perfecta desde el principio.
Intentan mejorar y superarse a sí mismos para poder
dar lo mejor en cada partido y hacer que el equipo crezca y vaya ganando
confianza poco a poco, dejando de lado cualquier atisbo de flaqueza. Y es que
la palabra “rendición”, no entra en su vocabulario, por lo que se jugarán el
todo por el todo, dando siempre el 100%. A pesar de lo fuertes que puedan
llegar a ser sus rivales, no cesarán en su empeño de llevarse la victoria
cueste lo que cueste. Todos tienen carencias que otros jugadores sabrán
compensar a la perfección, gracias a la diversidad de técnicas que posee cada
uno, dando como resultado final, un equipo de lo más equilibrado.
El equipo, adora el baloncesto por encima de todo.
Viven por y para él y como es lógico, a pesar de no querer ser derrotados a la
primera de cambio y
tener como meta derrotar a la “Generación de los Milagros”
ganando los distintos campeonatos que se les pongan por delante, para ellos lo
más importante es disfrutar del juego con el resto de sus compañeros (por
supuesto, sin perder de vista su objetivo principal).
Se palpa desde los inicios el gran compañerismo que
hay en el equipo y sus ganas de convertirse en los mejores, trabajando siempre
juntos. Y es que, el hecho de que cada uno trabaje sus habilidades de manera
individual, no solamente dará como resultado una mejora propia, sino que beneficiará
su juego en equipo (con el que lograrán destacar y hacer frente a sus rivales).
Algo que me sorprendió mucho es el protagonista.
Uno se espera que sea el típico personaje que tiene talento innato para todo,
pero es todo lo contrario, ya que padece todo tipo de carencias. De hecho,
ninguno se explica cómo pudo pertenecer a la “Generación de los Milagros”. Algo
sorprendente es que desde un primer momento
es un jugador invisible, que no
destaca por encima del resto
y pasa desapercibido (aunque esa sea su mejor
baza), pero que luego se convertirá en un jugador irreemplazable y totalmente
necesario para el equipo.
Para mí, este anime no tiene secundarios. El mayor
protagonismo recae sobre el equipo Seirin, más concretamente en Kuroko y
Kagami, pero el resto de personajes los considero igual de importantes (incluso
más en ocasiones que los propios protagonistas),
ya que todos y cada uno de
ellos es imprescindible y juega un papel fundamental en la historia, por lo que
es imposible relegarlos a un segundo plano.
No quiero dar detalles ni desvelar nada de cada
personaje, puesto que ir conociéndolos poco a poco e ir descubriendo sus
diferentes habilidades a medida que avanza la serie, es uno de los puntos que
más me ha gustado. Y es que las habilidades de cada uno son de lo más
surrealistas, a la par que sorprendentes y es ahí donde radica parte de su
encanto, por lo que, esperas en todo momento la aparición de uno de los
miembros de “La Generación de los Milagros” en la cancha y ver qué as tiene
bajo la manga.
¿Kuroko no basket VS Slam dunk?
Hago un receso en la reseña para comentar algo que he
leído en infinidad de ocasiones: la comparación entre ambas series. Han sido
muchas las personas que han dejado de lado Kuroko no basket porque, según
ellos, no estaba a la altura de su predecesora.
Sinceramente, es inevitable que si dos series parten
de una misma temática se tienda a compararlas, pero en este caso, quitando que
ambas giran en torno al mismo deporte, poco tienen que ver la una con la otra.
Si quien empieza a ver la serie espera encontrarse
con un “nuevo” Slam Dunk, ya se puede ir quitando esa idea de la cabeza, porque,
como he comentado, lo único que tienen el común es el baloncesto. Cada una toma
un rumbo muy distinto.
Espero que la gente que se haya hecho una idea
preconcebida, le dé una oportunidad.
¿Qué más puedo decir?
Kuroko no basket lleva el baloncesto hasta límites
insospechados, con partidos que no llegan a eternizarse y con jugadas y
movimientos imposibles, que harán las delicias del espectador, a la par que
mantenerlo en tensión capítulo tras capítulo.
Solamente, por mínimo que te llame la atención,
deberías darle una oportunidad, porque es un spokon que
ha sabido destacar y posicionarse
en lo más alto, siendo considerado como uno de los mejores del género.